Como si no tuvieramos suficientes problemas en la Administración de Justicia catalana en la que venimos sufriendo las carencias o falta de interés, demostrado con la negativa a tener oferta de empleo público para 2016, el retraso en más de un mes en cubrir ciertas plazas, si es que se cubren alguna vez, ahora se nos informa por la Generalitat que todos los nombramientos que se realizacen para cubrir plazas no vacantes (enfermedades en gran parte) solamente trabajaran hasta el 31 de julio por falta de presupuesto.
Hasta aquí es algo habitual y recurrente en el tiempo, pero no deja de ser indignante.
Estamos hartos de soportar sobre nuestras cabezasreformas legales sin recibir formación, realizar el trabajo extra que ha supuesto la revisión de miles de expedientes por la reforma de la LECr sin apoyo alguno, de no recibir la devolución de la paga extra de 2012 cuando hay sentencias favorables (por no hablar de la de 2013 y 2014), ver como a los compañeros de prisiones sí que siguen cobrando la paga de productividad (antiguo PIPE).
Pero si lo anterior no fuera suficiente, tenemos que ver a diario noticias que anuncian cómo el Govern ha incrementado nuevamente el número de cargos eventuales, que siguen los altos cargos sin demostrar la austeridad que sería exigible y que para colmo pretenden abrir 10 nuevas "embajadas" con el gran costo que supone.
Sabemos que no le importamos nada a la Generalitat, porque no somos "sus funcionarios", pero deberíamos empezar a plantearnos si nosotros estamos haciendo lo suficiente para ganarnos el respeto por parte de quienes nos gestionan.
¿HASTA CUÁNDO AGUANTAREMOS?